Hoy os hablo de tabernas que he conocido hace poco y que me han encantado. Poco tienen que ver entre sí pero en ambas la materia prima es clave y se come mejor que bien!
La Taberna del Loco Antonelli, cerca de la plaza de Olavide, es un local pequeño y luminoso con pocas mesas y una barra donde se come y se bebe muy, muy bien. Su cocinero, Sergio Mange, mexicano de origen, tuvo un pequeño puesto en el mercado de Chamberí que enseguida se le quedó pequeño precisamente porque se comía fenomenal.
En el restaurante, que lleva ya dos años abierto, Sergio, sigue la misma línea, cocinando platos de siempre con un punto innovador y dándole mucha importancia a pescados y mariscos. Le gusta definirlo como Taberna marinera.
Espectaculares las gyozas de rabo de toro con curry rojo y fondo de cangrejos, croquetas de mejillón, bravas, alcachofas, pulpo con espuma de patata, picaña de La Finca con patatas y mención especial para la merluza con merengue de alioli. En sala, cuenta con Rubén (Ex Soy Kitchen) que sabe mucho de vinos y nos sacó unos súper interesantes y a precios muy razonables. Como colofón a una gran cena, donut a la plancha con crema inglesa, almendras caramelizadas y helado de avellanas y fresas con vermut y espuma de yogur y chocolate blanco, pastel de chocolate…
Taberna del Loco Antonelli
Calle de Olid, 15